La profesión mecánica ha estado siempre asociada al sector masculino. Con algunas excepciones, como todas las que confirman las reglas, lo cierto es que detrás de motores, lubricantes y talleres siempre ha habido mecánicos hombres.

Aunque sean las menos, en los últimos años cada vez recibimos más mujeres en nuestras formaciones, tanto en los certificados de profesionalidad como en los cursos desarrollados para profesionales. La automoción empieza a cambiar de mentalidad y en este sector que es la posventa, cada día son más las mujeres que ejercen cargos directivos, o no, y que consiguen darle a nuestro “mundillo” un aire nuevo. Un aire de igualdad.

Dicen que marzo es el mes de la mujer. En Carsmarobe no creemos en días, ni en fechas. Creemos en hechos. Abogamos por un calendario con 365 días por y para la mujer, pero también por y para el hombre.Para personas, que es lo que somos, un sexo y otro, a fin de todas las cuentas. Profesionales. Grandes profesionales en la mayoría de los casos. Grandes mecánicos y mecánicas.

Nuria Horcajada cree en esta igualdad. Ha estudiado con Carsmarobe un certificado de Mantenimiento de Sistemas de Transmisión de Trenes de Rodaje de Vehículos Automóviles porque siempre la ha “apasionado la automoción” y viene de una familia que se dedica a ello. Nuria ha realizado sus prácticas en Motor Cebis, un taller de Alcorcón dirigido por Jesús Fernández Molero, “un mecánico de los de toda la vida”. Jesús asegura que está “encantado de haber recibido a una mujer” y que “un buen mecánico no entiende de sexos, si no de profesionalidad. Nuria lo ha demostrado. Y todos los compañeros que han venido antes que ella. Ojalá tuviera espacio para ofrecerles a todos un puesto con nosotros”.

Aunque aún queda camino por andar, y habrá muchos otros 8 de marzo que celebrar, en Carsmarobe creemos que llegará el día en que no se hable de sexos, ni de razas, ni de ninguna otra distinción. Llegará ese día en el que se hable de personas, de profesionales y se mida a todos por un mismo rasero. Hasta entonces, Nuria, Jesús y todos los que hemos formado, formamos y formaremos parte de este sector mecánico somos responsables del presente y del futuro. Y estamos comprometidos con la auténtica igualdad entre hombres y mujeres.