Como ya pasara hace unos años con la manipulación de los gases fluorados, ahora llega el turno a la regulación de los riesgos laborales. Las últimas modificaciones presentadas en el II Convenio del Metal (publicado en el BOE) de junio de 2017, obligarán, a todos los mecánicos y personal de oficina adherido a dicho arreglo, a formarse en riesgos laborales con un reciclaje cada 3 años.
Y es que necesitaremos contar con este título de manera obligatoria para poder ejercer en el citado convenio. Según la categoría de los trabajadores, habrá desde una formación presencial de 20 horas para mecánicos (y cada 3 años una especialización de 4 horas adicionales) hasta otra de 6 horas a distancia para el personal administrativo y directivo. Con cierta moratoria (concretamente de 3 años), esta será una medida que afectará directamente al funcionamiento y al día a día de cualquier taller. Al igual que ocurre con los gases fluorados, este “carné” será personal e intransferible, por lo que todos los empleados deberán formarse en él y disponer de la titulación ahora regulada (y que dispone de un módulo de 50 horas adicional para aquellos que quieran ampliar su formación en este cometido o que dispongan de funciones preventivas).
Este mes he querido dedicar mi editorial a informar de esta nueva medida, que para mí resulta de total relevancia en nuestro sector. De hecho, en Carsmarobe, además de nuestra escuela y asistencia técnica, contamos con un taller al que afectará directamente esta normativa. Y es por esto, y por nuestra condición de formadores, que ya nos hemos puesto a trabajar en torno a este credencial, que sólo podrán impartir entidades acreditadas a tales efectos (como es la nuestra).
Sin duda, nuestro sector es un referente en cuanto a formación se refiere. Ya no sólo en todo lo relacionado con las nuevas tecnologías, el pass thru, la conectividad, etc. Sino que, además, desarrollamos nuestra labor en torno a elementos que portan vidas: los vehículos. Y en este sentido, y en muchos otros como los riesgos laborales, debemos mantenernos constantemente actualización. Ese es nuestro principal lema en Carsmarobe, que vivimos adelantados al futuro, analizando tendencias y creando formaciones que se adapten a las necesidades de nuestros clientes: talleres, fabricantes, distribuidores, redes, etc. Todos estos, encabezados por compañías como la nuestra, deben brindar apoyo a los afectados por esta normativa y consultar con empresas especializadas y de confianza para ponerse al corriente en materia de riesgos laborales.