La respuesta está en Motortec
El mes pasado el mundo de la posventa celebró su cita más importante en nuestro país. Cientos de empresas y miles de profesionales visitaron el Ifema, que del 11 al 14 de marzo se convirtió en el hogar de los recambios y de los talleres. Esta edición de 2015 tenía un claro protagonista: El taller. La organización de Motortec lo planteó de tal manera que los mecánicos se sintieran como en su casa, y pudiesen ver de primera mano las últimas novedades; Las que harán que su día a día mejore sensiblemente.
El ambiente que se vivió en el IFEMA durante los intensos cuatro días fue memorable. Son muchos los profesionales que, con familia incluida, se dejaron caer por los 6 pabellones que componían la feria. Y aprovecharon para intercambiar impresiones, experiencias… Porque espacios como Motortec son, sin duda, una experiencia muy enriquecedora para los mecánicos. Bien lo sé yo, que hasta hace pocos meses he dirigido un taller. Que soy, como todos ellos, un técnico profesional. Que no sólo quiere escuchar a los comerciales de la empresa de turno. Que acude a una feria para compartir conocimientos con compañeros, con quienes se enfrentan cada día a los mismos problemas en su taller. Y ahora aún más con las nuevas tecnologías: sistemas anticontaminación, vehículos híbridos… novedades que han entrado con mucha fuerza y que, a veces, complican un poco la tarea. Porque generan muchas preguntas. Muchas dudas e inquietudes. Y lugares como Motortec, espacios como el que tuvo Carsmarobe, resuelven y aportan respuestas. En el stand 6D12 muchos profesionales se vieron arropados por el equipo de nuestra empresa. Pudieron ponerle cara a Servicios como el de formación o Asistencia Técnica. Se sintieron escuchados. Y, en muchas ocasiones, comprendidos.
Desde una perspectiva más personal, Motortec para mí ha sido experiencia verdaderamente enriquecedora. He descubierto muchas empresas nuevas y negocios que antes no trataba. He abierto, aún más si cabe, mi perspectiva: mi visión de este mundo, para descubrir lo grande que es. La de personas que comparten mi pasión por el automóvil. Y coincidir con gente que se mueve a tu mismo ritmo es indescriptible. Es lo que te hace amar esta profesión.
Si alguna vez alguien se pregunta por qué amamos tanto esto, que se pase por la siguiente edición de Motortec y encontrará la respuesta.
